
Lijado de Pladur
Existen dos tipos de lijados, el manual o el mecánico. Esta operación es bastante delicada, por lo que se deben tener presentes ciertos consejos.
LIJADO MANUAL

El lijado manual es más lento, pero más controlado a la hora de realizarlo. Se debe tener especial cuidado de no hacer hoyos en la junta, ya que al ser una herramienta de pequeño tamaño, peligra que esto ocurra. Al lijar los perímetros de la junta, debemos extremar el cuidado de no llegar a la celulosa de la placa ni tampoco a la cinta de juntas.
LIJADO MECÁNICO

Por el contrario, el lijado mecánico es más rápido, ofrece mejor planeidad en la junta y genera unos rendimientos altos. Esta herramienta debe ser utilizada por operarios que tengan cierta experiencia en el uso de la misma. No controlar la lijadora y llegar a la celulosa de la placa puede dañar la superficie de esta y romper las fibras de dicha celulosa, generando serios problemas en la decoración final.
RECOMENDACIONES

Una vez lijadas correctamente las juntas, se debe limpiar el polvo de la superficie de los tabiques.
Debido a que existen cambios de tonalidad, así como las diferentes absorciones de la celulosa y la pasta de juntas, es imprescindible aplicar en todos los casos una imprimación que homogenice la absorción, textura y color.
Para los casos en los que se prevea pintar en un tiempo prolongado, es recomendable proteger de la luz solar todos los paramentos aplicándoles una imprimación de alto poder cubriente de color y nunca al agua. No debe considerarse imprimación a una mano de pintura diluida en agua (salvo que el fabricante garantice esa función).